
Por Pablo Arietti | redaccion351@gmail.com
Por Luciano Debanne.
Ahora, justo antes del otoño.
Y a mí sólo se me deshojan lugares comunes, que todavía no tienen la sequedad marrón, el pequeño olvido de vida, el tránsito del tiempo y la intemperie, que uno espera que tengan las cosas que se caen.
Ni la dignidad de lo que ha sabido envejecer, ni la piedad que merecen las cosas moribundas. Nada de eso.
A mí se me deshojan pequeños pensamientos verdes, apenas florecidos, que ya no van a madurar, ni ser semilla, ni germinar.
Ahora, justo antes del otoño, y yo todavía con este velo eternamente empimpollado, tan tontamente primaveral.