Con permiso

De a dos

27-09-2020 / Con Permiso, Lecturas
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Hay quienes piensan que la política, la educación, la seducción, hasta la amistad se trata de convencer, de informar, de venderse. Pero hay otro modo de pensar las cosas.


De a dos

Por Luciano Debanne.

Hay quienes piensan que la política, la educación, la seducción, hasta la amistad se trata de convencer, de informar, de vender… venderse.

Lo piensan como una relación en el que uno tiene y el otro carece, como quien viene a completar una pobreza. Como una limosna, una dádiva, o una transacción comercial. Quien da y quien recibe. Beneficios, conocimientos, información, cariño, amor.

Quien recibe está en deuda. Quien da es más importante. El dealer la tiene, el junkie es quien sufre, quien debe venir al pie. Si te la regala es de buena onda, pero si quiere puede no dártela. ¡Qué porquería! ¡Qué manera de subvalorar a los demás!

Si la piensan un poco, van a ver que estamos cruzados todo el tiempo por esas formas de entender al resto, por ese modo de querer estar con los demás. Lleno y vacío, arriba y abajo, adelante y atrás. Pensamos así todo el tiempo.

Pero hay otro modo de pensar las cosas. Como si la cosa fuera entre pares. Y eso no significa que todas las personas están en el mismo lugar. Significa que no me venís a acariciar la cabeza desde arriba, mientras sonreís con consideración; significa que no me explicás el mundo como si fuera un imbécil; significa que no me engañás para que compre la tuya sin darme cuenta de lo que hago.

Significa que no buscás manipular sino compartir: un mirada, un conocimiento, una ganas de andar de a dos.

Presten atención, van a ver que está ahí. Como una matriz que atraviesa hasta nuestras mejores intenciones, nuestros vínculos más queridos, nuestras planificaciones laborales, nuestras charlas cotidianas, nuestras cartas de amor.