Ponele que te moriste

¡Dale Titi!

4-09-2013 / Lecturas
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Nuestra página le mueve la manito, para decirle «Hola», a un maestro de la música y de la vida.


¡Dale Titi!

Por | redaccion351@gmail.com

Jodenos que te moriste Titi. Naa. Justo ahora loco que tu ciudad es un delirio de músicos tremendos que supiste empujar hacia cuánta belleza. ¡Cuánta!

Dejate de joder. Ta fácil creerte man. ¿Ahora vamos a tener que asumir que no te vamos a ver más a los abrazos en cualquier escenario? ¿Qué onda?

No hay ni media chance de irse a ningún lado papá. Vamos vamos. ¡Vamos que si vos te vas la de mirarse las caras va a durar un rato más largo que la procesión de músicos y demás artistas y periodistas y vecinos y familiares y amores y gentes de todos los palos que te quieren!

¡Si te quieren todos loco! Sacá la cuenta: te quieren todos, te respetan todos, te admiran todos. Vas caminando por ahí y te saludan todos. Con el fachón de pendejo moquero que te quedó de cuando eras chango, ¡cómo no te van a querer todos! Con las pilas tremendas para laburar, ¡cómo no te vamos a respetar! Con el locurón que les dejás a las violas que te colgás, ¡cómo no te vamos a admirar!

¡Dale vieja! Ponele que te moriste. Uno está más o menos acostumbrado a enterarse de que la gente se muere y por ahí alguno conocido, y hasta algún grosso que de tanto en tanto se va y te sacude los días. ¿Pero a vos, justamente a vos te parece tomarte el palo ahora?

No sé si viste la changada hermosa que anda siguiéndote. La cantidad de loquitos que aprendieron de vos, con vos, por vos. Mirá, nosotros acá en la página esta que queremos tanto, ¿qué seremos? No más de quince, veinte. Algunos más pendejos, otros ya medios viejos chotos. De todas las entrevistas que hicimos a unos cuántos músicos o bandas, si no aparecés en algún comentario, siempre halagador, pega en el palo. Que les produjiste el disco, que participaste en la grabación de algún tema, que les enseñaste algo, que les prestaste no sé qué cosa, que compartiste escenario, que los alentaste, que les dijiste mejor por acá, que te les apareciste, que los invitaste, no sé. ¡Estás en todos lados loco! ¿Y ahora resulta que ya no?

No queremos quedarnos con tu obra y esas giladas que siempre se dicen. Porque a ver, decime si no: tu obra, casi en la misma proporción que la música que ya nos dejaste, es también el estar ahí, en el momento justo y en el lugar indicado para mejorar tantas músicas amigas. Tu obra es una escuela repleta de pelados y peludos divinos que, como nunca, vienen sonando a full, cada vez más, en más y más espacios.

¿Y qué nos vas a decir? Sí claro, más vale que ya sabíamos de la enfermedad hija de recontra mil putas esa que el día que la arrinconemos, mirá… El día que la arrinconemos le vamos a cobrar un retroactivo tan pero tan grande que por dios que te vamos a ver de nuevo tomándote un fernet criminal donde siempre. Donde siempre y cuando sea, a saber, en todos los rincones de esta ciudad donde suene buena música. Por dios que te vamos a ver.

Fijate lo que nos pusiste hace nada, unos meses. El último fin de año te rompimos los quinotos hasta que agarraste y nos pusiste: «Me siento un aprendiz de la vida. Estoy feliz por todo lo bueno y lo malo que me pasa…» Y fijate loco, fijate lo que nos pusiste después: «Hace años que vengo trabajando lo más honestamente posible, generando proyectos, colaborando con infinidad de artistas con los cuales aprendí muchas cosas. Doy gracias por todo eso. Por las posibilidades que tuve y tengo diariamente de transmitir algo, de comunicarme con el otro a través de la música. Estoy feliz además de que los músicos de Córdoba empiecen a trascender, a hacerse oir más allá de nuestra ciudad con proyectos sólidos, frutos del trabajo a conciencia y el talento, pero sobre todo porque tienen algo para decir…» ¿Y ahora resulta que te piraste?

Dale Titi. En serio dale. No te vamos a dejar ir. Con vos o ponele que sin vos, te vamos a encontrar siempre donde siempre te encontrábamos. Vas a estar ahí. Ya vas a ver. Y nos vamos a cagar de risa mal del día en que, otra vez ponele, te moriste.