Todo tiene un final, todo termina. Este 2018 parece empecinado en escribir últimos capítulos para todo tipo de proyectos, por razones que podrían parecerse bastante en sus descripciones de base.
Entre tantas iniciativas nacidas al calor de una escena abierta a diferentes públicos, la Jam Session de Es Lo Que Hay atravesó más de una década con una frecuencia de presentaciones de lo más regular que se pueda encontrar.
Sebastián Teves, uno de sus integrantes fundadores, que hace menos de un mes celebró veinte años con su banda Sur Oculto en dos presentaciones inolvidables que tuvieron lugar en Córdoba y Buenos Aires, compartió un resumen de la historia de la legendaria Jam Session, como invitación a la última noche en 990 Arte Club.
La compartimos.
Sebastián Teves – Jueves 20 de diciembre de 2018.
La Jam se despide.
Así es amig@s, luego de 14 años ininterrumpidos de hacer la Jam todos los jueves y sin que nosotros, los músicos de Es lo que Hay, la cancele siquiera una vez, llega a su fin.
Un ciclo que comenzó gracias a Gerardo Greco, que nos invitó a tocar en Punto de Fuga el primer año y decidimos hacerlo los jueves porque generalmente viernes y sábado salen otros toques y queríamos darle continuidad (nunca nos imaginamos que 14 años después seguiríamos).
La Jam comenzó en una época dónde no existía el concepto de Jam. Éramos un montón de músicos estudiando jazz y no teníamos un lugar fijo para poder tocar esta música que tanto nos fascina. Así nació este espacio sagrado para nosotros.
En la primera formación estábamos Martín Dellavedova en saxo, Raúl Pandolfi en teclas, Luis Barzola en bata y yo, Sebastián Teves en bajo.
Acá va un recuerdo de la primera época: una noche llovía cómo nunca y mi viejo me llevó a tocar, no se veía nada pero igual fuimos todos. Después de bajar los instrumentos agarró con el auto por costanera y la cantidad de agua que había le levantó el auto y casi se lo lleva para el río. Tuvo que bajarse y empujar entre el cordón y el auto para que no se caiga, lo pudo sacar y de ahí nos fue a buscar al bar para que lo ayudemos a empujar el auto hasta una estación de servicio y lo dejemos ahí ya que le había entrado agua al motor y no arrancaba. Fuimos todos lo Es lo que Hay, empujamos el auto unas cuatro cuadras abajo de la lluvia torrencial. Volvimos completamente empapados al bar, había dos personas, nos secamos lo más que pudimos y tocamos. Cuento esta anécdota porque creo que es un gran ejemplo del esfuerzo, la pasión, la seriedad, la entereza y la unidad que tiene este grupo hace ya 16 años.
En 13 años Luis no faltó ni una vez, yo he tocado hasta con 40 grados de fiebre y los chicos también. Ahí conocimos a Gonza Sánchez que empezó a pasar la gorra porque nosotros no nos animábamos y nos acompañó durante muchísimos años más.
Al siguiente año la Jam se mudó a 990. Allí, durante 7 años, vivimos innumerables historias, tocamos con prácticamente tod@s los músic@s de Córdoba, desde los principiantes hasta los que nos enseñaron, tanto como Bebe Caniza, Daniel Corzo, Fer Caballero, Walter Barraza, Edu Elía, la Small, entre otros. Pudimos darnos el lujo de tocar con algunos de los más grandes músicos de jazz de afuera de Córdoba como Pepi Taveira, Juan Cruz De Urquiza, Oscar Giunta, Carlos Lastra, Sergio Verdinelli, Ernesto Snajer, Mariano Loiácono, Alejandro Herrera, Carto Brandán, Mariano Otero, Jerónimo Carmona y muchos más. También leyendas del rock como Alejandro Sokol y Superman Troglio tocaron en la Jam, Uffff tanta gente, tant@s amig@s, tantos momentos increíbles que nos marcaron para siempre. Las zapadas con el Bam Bam que siempre pedía ir a 6/8.
Recuerdo también las corridas y conseguir tocar en Era o Casa Babylon cuando a último momento caía la muni y nos clausuraba. Luego Martín se iría y entraría nuestro hermano Mauri Tavella en guitarra y nos acompañaría unos buenos años. También nos acompañó Esteban Sosa y todo su delirio por un tiempo y este último año se sumó Raúl Giró, otro hermano más. También durante un tiempo tuvimos a Martín Barroso como tecladista cuando Raulo no podía por laburo.
Luego estuvimos en Belle Epoque un año y medio, después El Vecindario y La Fábrica lugares zarpados que nos trataron muy bien y al final volvimos a casa, el 990.
Podría seguir y seguir escribiendo pero no terminaría más. Hoy es la última y estoy honrado y orgulloso de este ciclo que duró 14 años de nuestras vidas y nos dió tanto.
Gracias Indio, Cani, Tunga, Fabián, Maccario, Cocó, Lara, Fer, todo el equipo del 990 viejo por tanto. Gracias a tod@s en Belle Epoque, El Vecindario y La Fábrica. Gracias Mayco, Hedgar, Elián, Chueco, Ángel y tod@s en 990 ahora por el tremendo aguante de este último año. No tenemos más que palabras de agradecimiento para ustedes por todo lo que hicieron.
Gracias a tod@s por haber ido a este ciclo y gracias Es lo que Hay (Dellavedova, Pandolfi, Barzola, Teves, Tavella, Sosa, Giró) y grandes amigos que nos reemplazaron en momentos: Barroso, Cravero, Pasquini, Marengo y gracias Gonzalaaaah y Meu.
Gracias por tanto, ¡gracias JAM de mi vida!
¡Nos vemos esta noche a celebrar y zapar por última vez en la Jam!
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