Por: @Josecomunicando
Hoy por la tarde se me cayeron unos lagrimones al leer mensajes de mis cumpas de la radio, que desde distintos lugares de la ciudad nos decían que la 99.5 se estaba escuchando. No se cómo se puede explicar ese momento. NO sé cómo transmitir la alegría tanto tiempo demorada que tenía esperando el momento por salir.
Será que fueron muchas las horas, días, meses y años puestos a este proyecto que por momentos se estancaba, que luego tomaba envión y daba recorridos laberinticos impensados. Pero siempre batallando, siempre midiendo los obstáculos que aprecian enfrente y de nuevo tomar envión para superar las dificultades. Esa fue nuestra constante característica, no aflojar, no bajar los brazos. Y por momentos los brazos no daban más, la mente se agotaba, pero siempre, créanme siempre estaba alguien esperando lo mejor de nosotrxs. Se los veía en las miradas, las de mis compañerxs, la de quienes con sueño, agotadxs pero siempre con esperanzaxs, nos impulsaban a más.
Y allí estaba la radio, todos los días al amanecer en el centro de nuestra vida, en el centro de nuestro problema. Y al dormir también estaba, ya que el desafío de mejorar esta herramienta de comunicación del campo popular habita nuestro sueño.
Pero para dar este salto fue necesario de la solidaridad de compañerxs que creyeron en la necesidad, justeza de este proyecto y en las personas que lo encarnamos. Allí están lxs cumpas de la Casa Caracol (hoy FOB) que hace muchos años nos cedieron un lugar para que lxs testarudxs comunicadores populares plasmáramos este imposible en la realidad. Están lxs compañerxs que solidariamente nos acompañaron en agotadoras jornadas de trabajo. Están lxs cumpxs todxs de la Red Nacional de Medios Alternativos que de impensadas maneras nos ayudaron y nos ayudamos a no ver el desafío como un imposible. Están lxs cumpas de la Biblioteca Bella Vista, que nos dieron un lugar para tomar altura y poder apuntar nuestros discursos contra las usinas del poder conservador represivo en Córdoba. Están lxs cumpas del Movimiento Lucha y Dignidad que no dudaron en darnos una mano cuando los aspectos legales nos acorralaban. Además lxs cumpas de la Cátedra Che Guevara que nos ayudaron a infiltrar nuestro discurso en la universidad. No me quiero olvidar de lxs anonimxs que en silencio aportaron para que el proyecto tome forma. También están lxs compañerxs del CISPREN que nos abrieron las puertas fraternas del sindicato, sin pedir nada a cambio y respetando nuestra identidad.
Como verán, decir Zumba La Turba es decir campo popular, es decir que es posible construir herramientas de comunicación desde abajo sin tener que depender, ni mendigar al sector privado o al Estado. Nada de lo construido hasta hoy es gracias a ninguno de estos dos actores (Estado – Sector privado), nada!!! De hecho para el estado somos un imposible y para el sector privado somos un inimaginable, ya que para el primero nada puede crecer si no es bajo el sol del AFSCA y para los segundos somos una contradicción, ya que nuestro valor supremo es que la comunicación no es mercancía.
Quiero dejar algo bien en claro, no somos una ONG o Mutual o algo que nos ponga en igualdad de condiciones con las fundaciones empresariales o grupos religiosos, tampoco una cooperativa, ya que bajo esa figura se ha bastardeado el sentido original de las mismas. Lo que si somos es una imperfecta asamblea.
Nuestra imperfecta asamblea que construye un medio autónomo, autogestionado e independiente del estado, partidos políticos o empresarios es la que pudo concretar esta realidad. No fueron los grandes discursos de los académicos y sus títulos refrendados en sus templos de conocimiento. Nada le debemos agradecer a la academia y sus ilustres representantes que salvo honrosas excepciones, siempre nos miraron con pena, o con altanería en el mejor de los casos, ya que la característica principal de estxs es negar nuestra existencia. Aún recuerdo cuando en una charla nos dijeron que no existíamos!!!
Nada de lo que somos es gracias al Estado, el AFSCA y sus proyectos de financiamiento, ya que para el actual marco legal seguimos siendo ilegales. Y como no nos sumamos a la tropa de aplaudidores nuestro lugar será el del destierro. Pero pobres ilusos, aquí estamos contra viento y marea construyendo y haciendo comunicación desde y para el campo popular.
¿Es que no se han dado cuenta aún?.Nostrxs nos oxigenamos cuando nuestro pueblo brava contra los monopolios y los enfrenta, cuando nuestros compañerxs trabajadorxs luchan, cuando nuestrxs hermanxs jóvenes enfrentan la represión, cuando las asambleas crecen, cuando las mujeres golpean al patriarcado, cuando la comunidad LGTTB se pone de pie, cuando desde la cultura de abajo se rompe las lógicas dominantes. En esos momentos nos nutrimos, nos fortalecemos, nos llenamos de orgullo y sentimos la necesidad de transformar el barro comunicacional desde otra lógica que no sea la comercial.
A todxs lxs que no nos creyeron, nos ningunearon, a lxs que sentaron a ver cómo nos caíamos por “inconducentes”, a lxs que pensaron que somos un experimento condenado al fracaso. Les digo, sin metáfora alguna…. ¡¡¡ Se pueden ir a la mierda !!!
Al resto lxs esperamxs en la radio con mates, criollitos y sonrisas, lxs invitamxs a fortalecer lo que nos pertenece, a continuar construyendo esa comunicación rebelde de nuestro pueblo.