Por Malena Muñiz | mmuniz@redaccion351.com
Fotos: Facundo Martínez l fmartinez@redaccion351.com
El 26 de julio comenzará, en la Cámara 7ª de Tribunales II, el juicio por el muerte de Natalia “Pepa” Gaitán. La joven fue asesinada el 6 de marzo de 2010 por Daniel Torres, el padrastro de su novia, quien se entregó a la Justicia horas después del crimen y, desde ese momento, permanece detenido.
La agrupación Devenir Diverse convoca a todas las organizaciones sociales, políticas y de Derechos Humanos a estar presentes en la primera audiencia del juicio. Samanta Peretti, miembro de la asociación, resaltó la necesidad de difundir y concientizar acerca de este hecho para que no pase más. Luego, afirmó que este crimen representa el más alto nivel de intolerancia hacia el otro, “ya que de no haber sido por su condición de lesbiana, hoy Natalia estaría viva”.
Otros integrantes de la organización cordobesa afirmaron que es indispensable el acompañamiento de toda la ciudadanía para mantener viva la memoria de Pepa Gaitán, exigir justicia y dejar en claro que ningún crimen de odio quedará impune.
Natalia tenía 27 años, vivía en Barrio Liceo 2ª Sección y trabajaba en la Asociación Civil Lucía Pía, espacio que brinda la copa de leche a los habitantes del lugar, organiza actividades infantiles, recreativas y talleres de oficios. Allí conoció a su pareja.
Daniel Torres le disparó a Gaitán con una escopeta que le había prestado un vecino. Natalia, gravemente herida, fue trasladada al Hospital de Urgencias, donde falleció la madrugada del 7 de marzo. Su muerte es hoy una bandera contra la discriminación de las personas por su orientación sexual tanto en Córdoba como en el resto del país.
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