TRANSPORTE ALTERNATIVO

No a la prohibición, sí a la regulación: una propuesta con palos en la rueda

14-06-2013 / Política y Sociedad
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De la mano de Córdoba Rollers, y bajo el lema “Patinar no es delito”, miles de rolleros de la Ciudad de Córdoba pujan por una reglamentación de esta actividad.


No a la prohibición, sí a la regulación: una propuesta con palos en la rueda

Por | mapaolaza@redaccion351.com

Fotos: Rocío Fornero.

Todo comenzó con un infortunio, un hecho que nadie desearía jamás. En noviembre de 2011, en la zona del Parque de las Tejas, se produjo un accidente con un joven que practicaba longboard y que tuvo como consecuencia su fallecimiento.

Lamentablemente, en numerosas ocasiones, se “espera” que sucedan desgracias de esta naturaleza para tomar medidas y evaluar las causas y consecuencias de un hecho tan lamentable. ¿Qué pasó? ¿Por qué? ¿Qué se puede hacer para que no vuelva a pasar?

Este tercer interrogante es el que abre el problema. Muchas veces. por intentar solucionarlo de manera rápida, se deja de lado la eficacia de la solución en sí, o cómo esta puede llegar a afectar a terceras partes que, indirectamente, quedan “pegadas” en algo que escapa de sus manos.

Luego de ese trágico hecho, la Municipalidad de Córdoba sacó una ordenanza prohibiendo el uso de rollers, skates y longboards en la vía pública. Y es aquí donde comienza a surgir “Patinar no es delito”.

Córdoba Rollers, en representación de diferentes organizaciones y grupos humanos, es el principal portador de esta bandera. El objetivo primordial de la demanda es el reconocimiento del roller como un medio de transporte alternativo y, en consecuencia, el establecimiento de la regulación pertinente.

Para todos los rolleros, el decreto establecido iba de la mano con un notable desconocimiento de lo que es el roller en sí y su utilización. No se trata de un juego de niños, un simple deporte o una actividad de recreación. Para ellos, va más allá de todo eso: es un medio de transporte. Al igual que para muchos es el auto, el colectivo, la bicicleta. Y ellos pujan para que sea reconocido como tal, como uno más.

Ahora bien, una vez asentada esa base, sí vale proceder con la correspondiente regulación y reglamentación. Esto implica: adaptación a las normativas generales de tránsito (señalética), edades pertinentes, lugares permitidos, velocidades adecuadas, entre otras. Todos aquellos ítems que hagan a una circulación libre y segura, tanto para los propios rolleros, como para los otros transportes y peatones.

Sin embargo, el problema que se plantea desde el Concejo Deliberante gira fundamentalmente en torno a la seguridad. En respuesta a ello, se plantea que la responsabilidad (o irresponsabilidad) arriba de este medio es la misma que se puede tener arriba de una bicicleta o de una moto, ni mayor ni menor. Por eso, desde Córdoba Rollers (como se suele hacer desde más de 5 años), están dispuestos a participar en la educación vial de los usuarios de rollers, pero para eso se debe tener primero una regulación.

En resumen, y como contestación al pedido de una propuesta formal por parte del Concejo Deliberante, “Patinar no es delito” propone tres puntos claves:

  • Que se garantice la libre circulación, sin limitaciones de días ni horarios, en los espacios para vehículos de tracción humana; espacios verdes públicos de grandes dimensiones; circuitos cerrados; y zonas residenciales con velocidad máxima de circulación de 40km/h.
  • Que se establezcan zonas de restricción a la circulación en vías con velocidad máxima de circulación de 60km/h, siempre y cuando se determinen dentro de ellas “corredores seguros” para poder desplazarse.
  • Que las zonas de restricción sean de libre circulación en horario nocturno, fines de semana y feriados, según se determine por reglamentación.

Actualmente, el proyecto ya está presentado. Se espera de que el Concejo pase el tema a debate, para poder explicar más profundamente la propuesta.

La lucha continúa y ninguno de los involucrados va a bajar los brazos. Hasta que no se haga marcha atrás a la prohibición, hasta que no se reconozca al roller como un medio de transporte como tantos otros, hasta que no se establezca la reglamentación necesaria para esta actividad y, fundamentalmente, hasta que se grabe en la conciencia de toda persona y político que PATINAR NO ES DELITO.