» Encuentro en el Club Social, Cultural y Deportivo Icho Cruz redaccion 351

Por Dévora Quinteros.

Quiero tomar unas palabras de Luis Pescetti para comenzar a charlar sobre la invitación de esta semana.

Gracias por el pueblo, el club, gracias por el remo,
por el río, y tu mano tomando mi mano.
Gracias, incluso,
por estar ahí todavía hoy.
Y no tomes como una traición que intente,
que me aleje y quiera
que me evapore y me pierda
que calce una mochila y no me lleve todo,
que la extravíe,
que deje las llaves por ahí o me olvide
de una cita, cada tanto;
por sentir que bastaría no ser como vos
para ser lo que realmente quiero…

¿A quién no le legaron algo? ¿Qué sintieron al querer ponerle su impronta a ese regalo?

¿O simplemente pensaron en la transformación de las cosas?

¿Qué es lo que queremos regalar hoy a las generaciones venideras?

Me imagino en las zapatillas de quienes pensaron el Club Icho Cruz, la previa, las discusiones, la burocracia que amenaza con aplastar cualquier sueño y sin embargo sumergirse en la entrega de un nacimiento.

El equipo responsable de llevar adelante el lugar nos invita a las actividades diarias (escalada para adultes y niñes, danzas folklóricas y reunión de sikuris) y también a disfrutar del encuentro con entrada gratuita que se dará este domingo desde el mediodía en calle San Martín 50 de Icho Cruz.

Habrá venta de empanadas, música en vivo y feria. Podés llevarte las empanadas a tu casa o comerlas ahí mismo.

Será el primero de los festejos que se van a realizar durante todo el mes, así que estén atentis.

Fue en octubre que se abrieron las puertas por primera vez, es en otro octubre, después de 43 años bajo el puente, en que se celebra la reapertura de este espacio.

Cuando escucho el audio del Mati (agitador del club) en que me cuenta cómo viene la cosa, nombra las palabras “pueblo y encuentro” varias veces. Pienso en el agradecimiento por el pueblo, el club y el remo, porque son elementos esenciales para el encuentro con otres y con nosotrxs mismxs, esa instancia en que podemos bucear por la aguas de lo que realmente queremos ser.