Por Violeta Brodsky | vbrodsky@redaccion351.com

Cuando los distintos medios anunciaban, de forma apocalíptica, el fin del disco objeto de la mano de internet, ese monstruo infinito capaz de devorarse los formatos tradicionales, tres emprendedores decidieron crear Mercurio Córdoba, una disquería de música independiente que, además, propone otros proyectos culturales, y que no tardó en crecer a lo largo del año 2014.
Si bien el nombre y formato era “importado” de Buenos Aires (lo que les facilitó el primer contacto con músicos y público) poco a poco Mercurio Córdoba pudo marcar su impronta con tonada provinciana y hacerse un espacio en el circuito cultural de La Docta.
Lucía, Leo y Fran fueron los encargados de este proyecto aunque, confiesan, fue Lucía (o Lupita) la responsable de, sin vergüenza, hacerle la propuesta a Mercurio Buenos Aires, que no tenía antecedentes en el tema de “sucursales”.
Aprovechando uno de sus viajes a Buenos Aires se hizo amiga de Diego Bulacio, uno de los dueños de Mercurio, proponiéndole expandirse. Luego lo conversó con Leo, quien no dudó en aceptar la propuesta.

“Nos faltaba una pata más que involucrara otros aspectos, ella le comenta a Fran, que es músico, y se re copó. En esa búsqueda de socios le confirman a Lupita que sí se puede abrir Mercurio Disquería. Una cosa era abrirla desde cero y otra era abrirla con una chapa. Y nosotros re sentimos esa chapa porque hay gente que no tenemos idea quien es y se acerca a Mercurio”, relata Leo.

¿Tienen ciertos lineamientos de Buenos Aires?

Leo: Somos independientes aunque mantenemos un ida y vuelta con Buenos Aires. Cada vez que se acerca un músico nuevo le sugerimos que deje discos también para Mercurio Buenos Aires y desde Buenos Aires hacen lo mismo.

¿Cómo es la relación que tienen ustedes con los músicos?

Leo: Al principio nos armamos un stock de discos de Buenos Aires, pero no tardamos en meterle pata para que nos traigan su producción los músicos de acá.
Lupita: Nosotros en realidad nos contactamos con todas las bandas para que nos dieran sus discos. Nos costó por ahí que se acerquen ellos mismos. A veces cuesta que se cierre ese círculo: hacen la canción, la producen, la graban y se quedan ahí.

¿También tienen relación con los sellos independientes?

Lupita: Si, y ahí es mucho más fácil.

¿Cómo fue la recepción del público cordobés?

Leo: Hay un público habitué a venir, pero aún no está hecho este nicho comprador de discos.

Lupita: Igual fue buena la recepción porque todo el mundo decía que hacía falta un lugar así.

Mercurio organiza, además, un ciclo musical llamado El Sillón (el nombre se lo da un característico sillón floreado de corte antiguo que tiene la disquería). Se trata de un recital acústico semanal de alguna banda o solista independiente. En un comienzo se hacía adentro de la pequeña disquería en un ambiente bien íntimo. El boca en boca no tardó en llegar y el ciclo se trasladó fuera del local, en la entrada de la galería donde está ubicada la disquería, cervezas de por medio…

El ciclo del sillón… ¿Es idea de ustedes?

Lupita: Surge de Buenos Aires pero acá lo hacemos con bastante más frecuencia. Incluso tenemos músicos en espera que quieren tocar. A veces viene gente de Buenos Aires que se presenta en otro lugar o pasa a dejar discos y aprovecha y se presenta acá. El toque que tenemos, que no es de allá y que, de alguna manera caracteriza nuestro ciclo, es el sillón. Porque la idea es, desde el principio, que el espacio no sea solo una venta de discos sino que sea un espacio donde se muevan otras cosas. Articular todo con el circuito independiente de Córdoba.
Además se suman a otras movidas independientes..

Leo: Si, estuvimos en Mosh, La semana de la música, entre otros. También nos llaman bastante para ferias. Si toca alguna banda hacen una serie de discos y nos llaman. Tratamos de acomodar los horarios a eso.

Lupita: En esta pared (señala) queremos hacer también muestras de fotos temporales, que participen fotógrafos con fotos de bandas.

Leo: La idea es fusionar con cosas que no sean puntalmente música, expandir la red.

Lupita: Córdoba está creciendo un montón y necesita lugares como este u otras movidas que vayan ampliando este circuito.

¿Cómo ven desde adentro el crecimiento de la movida cultural de Córdoba?

Lupita: Este semestre explotó de movidas musicales, lanzamientos de discos, bandas, etc. Nosotros estuvimos como punto de preventa de cuatro discos (Telescopios, Viaje a un minúsculo planeta, Hipnótica, Un día perfecto para un pez banana). Esa forma esta buenísima, nosotros lo re apoyamos porque nos parece muy bueno actuar colectivamente. Están surgiendo formas para afrontar los gastos de generar un disco, que son bastantes. La idea de la disquería es crear y ampliar los receptores de la música independiente. Hay gente que ni siquiera sabe qué es la música independiente, o que no escucha música de Córdoba. Un poco el objetivo es ser un puente entre la música y la gente.

Los chicos de Mercurio tienen una relación particular con internet. Lejos de tomarlo como un enemigo decidieron hacerlo parte de la disquería, utilizando las plataformas musicales que este le brinda para una primera aproximación a la banda. Para ellos internet no es una competencia.

Leo: Estas bandas se manejan todas por plataformas gratuitas entonces es medio loco vender el disco para que lo uses como el objeto básico de escuchar música. ¡Todo el mundo tiene internet!. Entonces, lo que ofrece Mercurio es un objeto de culto, como un libro. Algunos vienen porque tienen un oído más fino y saben que no es lo mismo escuchar el disco que escucharlo desde la compu, otros vienen porque quieren tener el disco, otro porque banca a la banda o son amigos…

Lupita: Por eso el slogan de Mercurio es “escúchalo online, conseguilo en Mercurio”. Nosotros mandamos un catálogo por mail donde está el artista, el disco y el link para escucharlo. Eso ayuda porque la gente viene a buscar el disco que escuchó por internet. Te gusta mucho un disco y queres tenerlo.

Para completar lo logrado este 2014 Lupita entiende que lo que falta es que las bandas salgan un poco más de Córdoba Capital y se animen a otros circuitos del interior de Córdoba.

“Que todos, desde su lugar (nosotros como disquerías, los productores con sus fechas, los lugares físicos facilitando las cosas) hagan su parte lo más prolijamente posible. Hay que creer en lo que cada uno hace y activar, sino difícilmente se pueda lograr algo. Ser solidario, generoso, darse una mano cada vez que se pueda. Estamos todos yendo hacia lo mismo”.