
Por Pablo Arietti | redaccion351@gmail.com
Hoy es domingo 4 de junio. Carlos «Pecas» Soriano, o mejor, el querido Pecas, va por su séptimo día de huelga de hambre en la entrada del APROSS, ahí por Cañada y Achával Rodríguez.
El lugar se ha convertido en un río incesante de personas que van a abrazarlo para darle fuerza. Familiares, artistas, docentes, políticos, médicos, periodistas, amigos, conocidos y desconocidos que pasan y lo saludan con un puño apretado, un abrazo, una canción, una danza.
Con sólo recorrer su espacio en Facebook o poner su nombre en los buscadores es posible advertir la enorme repercusión de su lucha, que ya es nacional.
Por estos días, Pecas recibió a numerosos espacios de difusión para dar testimonio de su experiencia personal, que con el transcurso de los días se transformó en un gesto abarcativo de cientos de historias lamentables de afiliados que como él, padecieron y padecen la burocracia y la indiferencia de la Administración Provincial de Seguro de Salud.
Cerca del mediodía, con una predisposición y una entereza que emocionan, Pecas responde un par de preguntas que quisieran ser muchas más, pero una preocupación que ya es de todos por su estado de salud sugiere no extenderse en la charla para dejarlo descansar, porque seguro seguirán llegando más y más abrazos de apoyo.
Ojalá escuchen quienes tengan que escuchar, este testimonio y tantos más que han aparecido esta semana.
Entrevista a Pecas Soriano – Domingo 4 de junio de 2017.
Día 7 de su huelga de hambre.