Cada semana una historia para compartir en torno a la Escuela Alegría Ahora, contada por quienes todos los días de sus vidas, en cualquier lugar, encienden la chispa de la educación.
79. Yerba compuesta
Mónica Lungo, martes 27 de septiembre de 2020.
«Es que no se cual es la ierba compuesta…»
Como alguien que se dedica a la música, les alfabetizadores tenemos desarrollado el oído para escuchar cuando una persona que no sabe leer o escribir está en problemas.
Estábamos en pasillos continuos, pegados. Él no sabía que yo estaba ahí. Por eso se sorprendió cuando aparecí y le dije:
«¿Necesitas ayuda? Vení…»
Me miró asustado . No esperé su respuesta y le mostré dónde estaban las inalcanzables yerbas compuestas. La góndola se convirtó en mi pizarrón:
«Mirá, las que tienen dibujitos de flores, de frutas, de yuyitos, son compuestas. ¿Ves ésta? No, es solo yerba…»
Había muchas marcas. Eligió la más cara. Tampoco sabia los números.
«Llevá esta que es la más barata».
Estaba con vergüenza, pero sobre todo se lo veía muy sorprendido.
«Soy maestra, enseño todo el tiempo, es más fuerte que yo…»
Y ahí se sonrió.
«Gracias, ahora no me van a retar en casa….»
En pleno siglo XXI movés una piedra y explota el analfabetismo.
Da mucha bronca.
Equilibra su sonrisa: va a llegar a su casa con lo que se le pidió.
Esa chispa se llama dignidad y te la enciende la educación.
Notas relacionadas
78. Libros y Pañuelos
En la semana de la Memoria, unas palabras de la fundadora de la Escuela de Amor Político más querida a la Abuela Sonia Torres, presente ahora y siempre.
77. El amor hace milagros
Aprendió a bañarse en la escuela. En su rancho no hay baño ni agua. Muchas familias se bañan en la escuela. En cada baño no sólo se sacaba mugre, se sacaba dolores.
