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Standard Electrics

2020

No se puede resumir el 2020 de Standard Electrics sin repasar el 2019, ya que ese año tuvimos un cambio de formación y desde ahí nos acompaña Marcos «Corcho» González, baterista de Los Frenéticos.

Aunque la mayor parte del trabajo se siguió haciendo en la sala de nuestro guitarrista Pacho, quisimos dar un paso más e invertir en grabar algunas partes de los temas en estudios más equipados, allá en Córdoba. Eso implicó aprender a laburar de otra forma y aprovechar cada venida de Corcho a Arroyito.

Por eso nos metimos a boxes en 2019 y tocamos una sola vez en vivo. Fue un gran cambio porque al principio, sobre todo 2015 y 2016, éramos una banda que tocaba varias veces al mes.

El 2020 pintaba que iba a arrancar con todo e íbamos a recuperar un poco el ritmo: metimos una fecha el 29 de febrero y estuvo copada. De local en La Casona de Arroyito siempre nos fue muy bien; hay una base de gente que nos hace el aguante. Somos una de las bandas que nació con el bar, que también es de Pacho (vive ahí). Dicho sea de paso: la movida de La Casona es algo digno de investigar por los periodistas de Córdoba.

Pero 15 días después de tocar, pasó lo que pasó y el 2020 se volvió rarísimo (para toda la humanidad). Con la pandemia no pudo venir más Corcho. Lepo estuvo esbozando ideas con la guitarra en su pieza. Pacho y el bajista Tomi también crearon algunas bases y al mismo tiempo se enfocaron en su proyecto Los Godínez, que surgió para pasar el rato cuando estábamos sin batero pero ya tienen muchos temas. También hicimos juntadas muy esporádicas para terminar las grabaciones de la formación nueva de Standard. El proceso se prolongó más de lo deseado pero llegamos a sacar cuatro singles en 2020. Búsquenlos en Spotify, Bandcamp y YouTube.

Un año con el freno de mano hizo que le diéramos un poco más de bola a las redes y a difundir el material; aunque no es nuestro fuerte para nada. Hasta donde sabemos, nos pasaron en Arroyito, Córdoba, Buenos Aires, Neuquén, Estados Unidos, Inglaterra y Perú. Nos hicieron notas por videollamada y presenciales y recibimos muchos comentarios con buena onda desde varios puntos del planeta. También la gente de Subnivel Discos (Villa María) nos sumó a su web y a futuros proyectos.

Desde varios lugares nos piden que vayamos a tocar apenas se pueda, pero siempre viajamos de nuestro bolsillo (recuperando parte de los costos, pero casi nunca el total) y ahora la mano pinta durísima para laburar así. Sumado a la desaparición de muchos bares por todas partes.

Al menos cerramos el año con una buena noticia que nos va a permitir grabar al menos dos o tres temas con más espalda allá en Córdoba. Ya estamos maqueteando y a mediados de 2021 tienen que estar listos. Pero el motor fundamental y lo que mantiene unida y motivada a la banda es que se pueda tocar en vivo. Que se recupere la actividad, va a ser decisivo este año.

Lo importante es que hay salud. Psicológica, no sabemos.

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