2021
Cerrar este 2021 fue cerrar también el pasado 2020. Cerrar un ciclo de dos años diferentes, raros, con muchas pérdidas, pero también con muchas alegrías.
El último mes y medio del 2021 fue sumamente intenso, de casi no tocar el fin de año se despidió con unos 15 conciertos, y con una de las experiencias más hermosas que me tocó vivir.
El año se vivió intenso con mis amigos y compañeros del Suonatori Irreverenti, un trío de música antigua que es hoy uno de los placeres más grandes que me toca vivir. Con instrumentos de época tocar la música escrita en el siglo XVII y XVIII principalmente.
A este trío se sumó el dúo Rodelinda, y pudimos experimentar y conocer la música escrita por grandes compositoras del barroco.
Otro de los grandes momentos del 2021 fue participar desde Córdoba en los festejos por los 240 años del nacimiento del gran Mauro Giuliani en la casa Museo en Bisceglie, Italia, uno de los más grandes compositores de música para guitarra.
Y cerrando el año, la hermosa posibilidad junto al Suonatori Irreverenti, Rodelinda y la Capilla Vocal dirigida por el maestro Marcelo Del Río, poder tocar un repertorio del llamado barroco Americano.
Para finalizar el año, la alegría de participar como solista tocando junto al Ballet de la Provincia de Córdoba en la sala Mayor del Teatro del Libertador San Martín. Una experiencia única y nueva para mí, en la cual pude disfrutar de nuestros grandes bailarines, trabajar al lado de grandes maestros, trabajar junto a la maestra Laura Fiorucci, y estar nuevamente en nuestro amado teatro del Libertador.
Un año pleno, muy emotivo, de muchos aprendizajes que me dejan con ganas de más.
El 2022 ya tiene grandes proyectos, mucha fuerza y ganas de vivirlo y disfrutarlo.
Gracias como siempre por dejarme ser parte de este hermoso anuario.
2019
El año 2019 en lo personal fue un hermoso año. Comenzó dando conciertos en México, siguieron en varias provincias argentinas a lo largo del año.
Con mi hermano Alejandro Pittis presentamos nuestro primer disco, «Imaginario». Un disco que nos ha traído y sigue trayendo muchas alegrías.
Como solista volví a tocar junto al querido Juan Otero y la Banda Sinfónica Municipal el Danzón Nº 3 de Arturo Márquez.
Con la música antigua sigo sumando alegrías con mis amigos del alma con quienes conformamos el trío de instrumentos antiguos Suonatori Irreverenti, Marcelo Del Río y Pablo Platte. Tocando por distintos lugares de la provincia de Córdoba.
Volví a tocar a dúo con otro guitarrista, mi amigo queridísimo Mario de Goycoechea, con quien participamos del segundo ciclo de conciertos de Guitarra en Garupa, Misiones.
Y como músico invitado a participar de otros proyectos, este año tuve el honor y el placer de compartir con el maestro Leonardo Waisman y la Compagnia Scaramella.
Y nuevamente de poder participar de La Verbena Del Rey, llevado adelante por Mariano López y Artifex, compañía de voces.
En lo artístico, profesional y personal, ha sido un hermoso año. Se cerró con hermosas novedades para empezar este 2020 con todas las pilas.
Y una de las mejores cosas, que nos da esperanzas: ¡Lo sacamos al gato!
A ponerle el pecho a este 2020, que se viene con muchos proyectos hermosos.
2018
El año 2018 fue un hermoso año musical y personal (no vamos a hablar del país).
Este año que pasó fue probablemente uno de los años más cargados de conciertos, sumando todos mis proyectos e invitaciones.
Seguí presentando mi disco “Hispano”, terminamos de grabar “Imaginario” el primer Cd del Dúo Pittis-Hernández con mi hermano del alma Alejandro.
Con el trío de música antigua Suonatori Irreverenti que tenemos junto a mis queridísimos Pablo Platte y Marcelo del Río también nos afianzamos como trío y comenzamos a crecer y sumar a gente querida y talentosa, para nutrirnos, compartir y aprender.
Fui invitado a participar por el Coral Takian Cay, a ser el guitarrista de su proyecto de cantar barroco colonial. También fui invitado por el maestro Mariano López y el Grupo Vocal Música Docta, a participar de «La Verbena del Rey», espectáculo musical y teatral.
A su vez tuve el honor de acompañar al tenor Ricardo de Aliaga en un repertorio de música española.
Volvimos a tocar, aunque sea por un par de conciertos, junto a mi querido amigo Mario de Goycoechea, después de unos seis u ocho años.
Y para finalizar el año, me confirmaron varias fechas para el 2019 que empieza con todo, de lo más hermoso, con muchos proyectos, viajes y con la esperanza de que a la hora de votar pensemos en el país, que cada mañana tengamos una razón para seguir adelante, ¡y que por favor se vaya el monigote que tenemos de presidente!
¡Gracias y buen año!
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