Ilustración: Quint Buchholz.
Reseña
Claudia de Lourdes Tejeda nació en Alta Gracia, Córdoba, Argentina. Poeta, narradora formada en talleres literarios. Ha obtenido reconocimiento en varios concursos de poesía y cuento. Sus obras han sido publicadas en varias antologías. Participa de mesas de lectura y encuentros nacionales e internacionales. Está a cargo de AMA América Madre filial Alta Gracia. Desde el año 2011 organiza las acciones de adhesión al Festival Internacional Palabra en el Mundo en su ciudad. Coordina la Noche literaria en “El café de las malas compañías”.
Libros editados: “De hiedras y grietas” (poemas y relatos); “Como racimo de abejas” (narrativa breve); “Andamios de pan” (poesía); “El rayo imperfecto” (poesía); “Anisacaterías” junto a Carlos Medina -(poemas ilustrados); “Un ojo con patio” (poesía).
Invitación
Cuando muere el padre, las conversaciones adquieren otros sustantivos legales, los metros cuadrados de patio tienen valor catastral, los abogados entran en juego. La memoria de los rincones se vuelve un papel en los expedientes para la declaratoria de herederos.
Nunca antes me había tocado en carne propia la palabra Tasación. Y como me parecía insoportable, la hice poesía. Con este grito gané un concurso. La ilustración es de Quint Buchholz.
Tasación
Vendo casa
con vista a la infancia
cocina poblada de gorjeos
cuando mi madre cantando
exorcizaba a la rabia
Con ventanas amables
al infinito
y alas por bisagras
Una tajada de sol
sobre el mosaico de la galería
y la sombra detenida
de mi padre
Vendo rincones irrecuperables
un escondite de muñecas
y una escalera imposible
para reponer estrellas malogradas
con oficio de farolera
Vendo el umbral
de luz intermitente entre beso y beso
el zaguán que fue campanario
el vértigo del balcón insomne
tribuna de ver la luna
El naranjo injertado hacia el fondo
que dio por fruto
una niña de ombligo
que se niega a entregar la llave
y el sudor de sus difuntos
frente al notario que regatea
recuerdos que no tienen precio.