2021
Transitar estos dos años de pandemia fue difícil para todos, indudablemente.
En nuestra actividad hubo muchos compañeros, con quienes me solidarizo, que sintieron el tremendo golpe de no poder trabajar. Me alegro ahora que se van abriendo lugares para mostrar su talento y ganar su sustento.
En mi caso, lo último que hice en música fue cerrar el Encuentro de Poetas en Cosquín 2020, junto al guitarrista Diego Santos, con el espectáculo «Yupanqui», que ya habíamos presentando durante 2019 en varios escenarios.
A partir de allí no hice nada más en música. Me dediqué a escribir mi primer libro (poesía y prosa) llamado «Claroscuros», que trataré de presentar próximamente.
Para este 2022 estoy trabajando en un espectáculo en el que abordaré una temática distinta a mi repertorio habitual. Hermoso trabajo que espero sea bien recibido por el público.
Muchas gracias por el apoyo constante a nuestro trabajo.
2020
Hablar de este año 2020 es bien diferente a lo contado en otros años. Lo dividiría en dos partes que siempre estuvieron unidas, pero que las circunstancias excepcionales que nos han tocado (y nos toca) vivir las hacen distintas.
En lo referente a la música, venía desde 2019 haciendo varias presentaciones, junto al gran guitarrista Diego Santos, casi todas dedicadas a Atahualpa Yupanqui . El 1 de febrero de este año cerramos el Encuentro de Poetas en Cosquín en el homenaje que se hizo a nuestro gran referente, con mucho público y una gratísima recepción de su parte.
Teníamos, con Diego, otros proyectos que no se pudieron realizar debido a la pandemia; también quedaron algunas pistas grabadas por otros músicos, con quienes pensaba grabar algunos temas, pero todo quedó en espera.
He sentido un gran vacío al no poder cantar, pero tuve más tiempo para la otra actividad que me atrapa: la escritura.
Siempre me gustó mucho escribir y lo hacía no tan seguido como lo hago ahora. Sin ninguna pretensión al abordar esto, sino «soltar» tantas cosas que llevo adentro y me urge expresar, he decidido reunir una serie de poesías que tenía guardadas y otras que escribí en este tiempo. Si Dios quiere tendré mi primer libro de poesías en pocos meses.
También estoy escribiendo una especie de «diario» para mi hija y otro para mis pequeños nietos , quienes también hacen música.
A este gran y forzado «silencio» lo llené escuchando mucha música, leyendo y realizando una introspección que a veces la urgencia de la vida no nos permite hacer, pero que es tan necesaria y productiva: tanto para lo bueno como para lo no tan agradable que ese mirarse para adentro nos revela.
La mirada y el abrazo con los seres queridos casi exclusivamente a través de una pantalla. Otro mundo, otras experiencias que sin duda cambiarán varias cosas en nuestras vidas. De cualquier manera, espero que la cámara no reemplace la mirada viva y que el abrazo siga siendo el estrechar al otro y sentir su corazón latir con el nuestro.
Nunca imaginamos que la vida nos tenía preparado lo que estamos viviendo: esta nube oscura aunque haya sol, este manto enorme que cubre cualquier lugar del mundo hacia el cual miremos, este miedo que aunque queramos no sentir, ahí está…
La vida nos igualó… La vida nos enseñó. Ojalá aprendamos que somos iguales a los otros, ni mejores ni peores, ni más ricos ni más pobres: iguales. Y que no nos quite la esperanza, esa esperanza que Martin Luther King dejó expresada en estas pocas palabras que me conmueven:
«Aunque el mundo se termine mañana , yo plantaré mi manzano.»
¡Abrazos!
2019
El 2019 ha sido un año difícil para todos y hubo que aguzar el ingenio para poder actuar y atraer gente a nuestras presentaciones. Pero el esfuerzo y la perseverancia de la mayoría de los artistas logró que se conocieran nuevas propuestas y se disfrutaran las ya conocidas.
Por mi parte, volví a mostrar en varios lugares de la ciudad de Córdoba y alrededores el homenaje a Atahualpa Yupanqui que vengo haciendo desde hace muchos años. En esta ocasión, acompañada por el magnífico guitarrista Diego Santos.
Estuve, como desde hace muchos años, en el Jurado de Música de la Competencia Estudiantil «Saldán Folklore Joven», un verdadero semillero de jóvenes talentosos y dedicados al rescate de nuestros grandes autores y compositores, como así también mostrando algunos otros que ya se vienen vislumbrando como serios sostenedores de nuestro folklore.
En abril de 2019 tuve la enorme alegría de materializar una idea que tenía desde hacía tiempo : la grabación de un disco «familiar», junto a mis nietos (Martín de 9 años y Alelí de 6) y el piano de nuestra amada e inolvidable Elvira Ceballos. Cantamos las canciones de la película «COCO» y algunas más, de nuestro cancionero dedicado a los más pequeños.
Entrando ya al 2020, estoy muy contenta por haber sido convocada para el cierre del Encuentro de Poetas en Cosquín, que este año cumple 20 años. Esa noche (1 de febrero) se hace un homenaje a Atahualpa Yupanqui y estaremos cantando sus obras e incorporando algunas sextinas de «El Payador Perseguido».
Además, tengo dos proyectos que confío poder hacer este año.
Nuevamente gracias a los medios de comunicación que me honraron con sus invitaciones para contar y cantar.
¡Un gran abrazo!
2018
Antes de comenzar con lo de este año hago referencia al espectáculo realizado a fines del año pasado (2017): «Pasiones Argentinas», con letra de Pacho O’Donnell y música de Antonio Tarragó Ros. Toman a parejas de la historia de nuestro país, excepto Eva Perón y el Che Guevara, que van solos, con diferentes ritmos de nuestra música folklórica. El público nos acompañó y nosotros (Cocho Pedraza, Chango Pirola, Marcelo Sosa Fagés, Bernardo Ferrero y Poly Tarditti) quedamos prendados de esa obra realmente hermosa. Lamentablemente no sabemos aún si la repetiremos en 2019, debido a los compromisos que cada uno de nosotros tiene tomados.
Desde 2015 estamos presentando nuestro espectáculo «Luna de Huaco – Tributo a Buenaventura Luna.» Somos: Juan Carlos Ciallella (piano), Daniel «Chato» Díaz (guitarra), Elio Balderramo (palabras) y Alicia Dutruel y yo todo a dúo cuyano. Enormes satisfacciones nos ha dado este espectáculo con el que recorrimos varias salas de nuestra ciudad de Córdoba y el interior. El broche de oro soñado fue presentarlo en Jáchal (San Juan), donde la recepción fue tan maravillosa que la emoción del público también se instaló en nosotros, haciendo que soltáramos algunas lagrimitas en el escenario. Difícil expresar en palabras lo que fue esa función y la atención recibida de parte de la gente de esa hermosa ciudad. Al otro día fuimos a visitar el «Molino Viejo» en Huaco (lugar de nacimiento de Buenaventura Luna), encontrando que quien está viviendo allí y cuidando ese muy valioso patrimonio es una prima de este enorme poeta, músico y político, creador de Los Manseros del Tulum, La Tropilla de Huachi Pampa y Los Cantores de Quilla Huasi. Cantamos «Vallecito» con ella y fue una emoción otra vez. De allí fuimos al cementerio y en su tumba le regalamos algunas de sus canciones, algo que hacen todos los músicos que la visitan. ¡Inolvidable viaje!
A mediados de año presentamos sus «Sentencias del Tata Viejo» y estamos preparando el segundo Tributo, con obras nuevas.
Este año he reeditado mis discos y creé mi página de YouTube, en la que he publicado una buena parte de las canciones que canté durante tantos años dedicados a la música. Aquí tuve una hermosa sorpresa: Roberto Palmer (ex-Quilla Huasi), que vive actualmente en España y de quien soy amiga desde hace muchos años, grabó sobre mi voz algunos dúos y los publicó en YouTube. Ha sido para mí un honor y mi agradecimiento hacia él.
Hace varios años que formo parte del Jurado de Música del Encuentro Saldán Folklore Joven de música y danza, que se realiza en esa ciudad en el mes de octubre desde hace 43 años, abarcando los mismos rubros que en el Pre-Cosquín. Es una experiencia magnífica, ya que participan escuelas secundarias de todo el país y es notable la calidad de lo que se ve y se escucha sobre el escenario. Verdaderos artistas, responsables, talentosos y con un repertorio de mucha calidad. Sus profesores de música tienen mucha conciencia de lo que deben escuchar y luego ejecutar esos adolescentes.
He tenido algunas participaciones en las efemérides con las que Sergio Antoniazzi comienza su programa «Todo Folklore» en Radio Universidad de Córdoba. Me encantó investigar sobre algunos personajes de nuestro folklore. Cariñoso gesto de Sergio, a quien también agradezco desde aquí.
Actualmente estoy con dos proyectos para el año 2019. Ojalá pueda cumplirlos.
Me alegra mucho ver a tanta gente joven y talentosa que se multiplica cada año a pesar de las dificultades. De una u otra manera graban sus discos, se presentan y van abriéndose camino a fuerza de voluntad y vocación.
Me apena mucho el cierre de Cocina de Culturas y de algunos lugares más pequeños, que daban cabida a tantas y buenas ofertas.
Ojalá las autoridades, de cualquier signo político, entiendan alguna vez que invertir en Cultura es uno de los pilares sobre el que se asientan otras capacidades, las oportunidades, el bienestar y la grandeza del alma de un país.
En otro aspecto de este recorrido, no puedo dejar de expresar mi profundo dolor por el fallecimiento de Francisco «Pancho» Barroso (14/11/2018) a quien considero como uno de los mejores guitarristas de nuestro país. Trabajé con él varios años y disfruté de su amistad, de su maravillosa guitarra y su profundo amor a la música. Recuerdo que Pancho siempre decía que lo que más deseaba era no perder nunca las ganas de estudiar que sentía al comenzar cada día. Gran pérdida su temprana partida.
Y para terminar, mi recuerdo permanente para el maestro César Ferreyra (creador y ex-director del Coro de Cámara de la Provincia de Córdoba), quien me enseñó a tener humildad y respeto frente a una partitura. Siempre recordaré sus palabras: «El peor defecto que puede tener un músico es aburrir.»
¡Gracias!
2017
En lo general, debo destacar la enorme cantidad de espectáculos que hay en Córdoba, prácticamente a diario: recitales, presentaciones de discos, libros, artesanías… Esto me da una profunda alegría porque veo gente joven que hace un gran esfuerzo para mostrar lo que produce y un público receptivo que acompaña.
En lo personal, ha sido un gratísimo año para mí: seguimos, desde hace dos años, haciendo «Luna de Huaco – Tributo a Buenaventura Luna» con Alicia Dutruel, con quien cantamos todo a dúo cuyano, Chato Díaz en la guitarra, el Doctor Elio Balderramo en los relatos y el maestro Juan Carlos Ciallella en piano, como músico invitado. No pensamos que lo haríamos tantas veces, aquí y en el interior, desde salas reducidas hasta en el Teatro San Martín, a pleno, con un público que receptó y agradeció nuestra propuesta. Digo esto porque la música cuyana no es muy difundida en Córdoba y de la inmensa obra de este autor y compositor cuyano no se sabe mucho. Estamos muy felices.
Participé también como invitada del Grupo Eusemos en el ciclo en el que invitaron a solistas de hoy que en algún momento participamos de grupos vocales (en mi caso «Americanto » y «Antares» ). Un lindo y emocionado recuerdo.
Ya finalizando el año estrené la obra «Pasiones en la Historia Argentina», de Pacho O’Donnell y Antonio Tarragó Ros, junto a Cocho Pedraza en los relatos y los músicos Chango Pirola, Marcelo Sosa Fagés, Bernardo (Toti) Ferrero y Poly Tarditti. Es una obra que recorre situaciones y pasiones de algunos personajes de nuestra historia, musicalizada con diferentes ritmos folklóricos de acuerdo a la región en la que desarrollaron sus vidas e historias.
También he abierto mi propia página de YouTube, donde se puede escuchar mi primer disco «Recopilando I», canciones que canté como solista en las varias ocasiones en que el Coro de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC hizo homenajes a Manuel J. Castilla, otras de mis homenajes a Armando Tejada Gómez y varias más. Tengo mucho aún por subir.
Sigo, como hace años, siendo jurado en la Competencia Estudiantil «Saldán Folklore Joven», para escuelas secundarias de todo el país, donde disfrutamos del talento de tantos jóvenes que llegan con sus ilusiones a tan importante Encuentro.
Mi recorrido con la música comenzó desde muy niña, pero coronó mis aspiraciones el haber estado en el Coro de Cámara de la Provincia en tiempos en que lo dirigía mi querido y admirado maestro César Ferreyra, quien nos enseñó cómo se debía hacer música, cómo respetarla y no «usarla», cómo sentirla y disfrutarla. Fue un maestro que hacía música con sus palabras, es decir, «explicaba» la música, la expresaba hablando, con metáforas, con colores que realmente se «veían» y de esa manera lograba la interpretación de una partitura. Mi eterno agradecimiento a él.
Para el año 2018 tenemos otro proyecto que ya casi está terminado: las «Sentencias del Tata Viejo», obra cumbre de Buenaventura Luna (una especie de Martín Fierro o del «Payador Perseguido» de Atahualpa Yupanqui ).
Les dejo el acceso a una muestra de lo que fue «Luna de Huaco».
¡Felicidades!
2016
Hablar de música es hablar de mi vida toda…
De padres y familia cantora, lo hago desde los 6 años.
Cuatro personas fueron fundamentales en mi vida con la música: mis padres, excelentes cantores, quienes me iniciaron en ese camino; en casa nunca ella faltó. César Ferreyra, fundador y ex-director del Coro de Cámara de la Provincia, quien me enseñó a enfrentar y respetar el mundo maravilloso, complejo y luminoso de una partitura, y Atahualpa Yupanqui, quien alumbró mi camino y dejó una huella profunda en mi vida y en mi canto.
Estuve en el Coro de Cámara de la Provincia y con el Grupo «Antares» durante mucho tiempo. Con este grupo recorrí festivales, radios, televisión, países vecinos e hice dos viajes a España, donde actuamos en muchísimos lugares y grabamos para la TVE (Radio y Televisión de España). También estuvimos una semana en París, donde cantamos en la «Maison de la Amérique Latine».
Ya como solista (desde hace muchos años) mi mayor preocupación es elegir un buen repertorio y nunca cantar lo que está «de moda»; siempre tiene que llegarme al alma la poesía, me tiene que conmover para después tratar, yo, de conmover a quienes me escuchan. Canté también como solista invitada en homenajes a Manuel J. Castilla (con el Coro de Agronomía, dirigido por Polo Román) y en «Mujeres Argentinas» (una puesta magnífica en el Teatro San Martín de nuestra ciudad) convocada por los maestros Hugo de la Vega y Matías Saccone.
Hice diversos homenajes a Atahualpa Yupanqui, Armando Tejada Gómez, Cuchi Leguizamón, Hnos. Expósito y Buenaventura Luna. Siempre acompañada por excelentes músicos y amigos. No quiero hacer la «lista» porque seguramente dejaré de nombrar a alguien y no quiero ser injusta. Este año fui invitada a compartir dos temas con Juan Falú («Voces a la Obra»), un orgullo y mucha emoción.
Para el 2017 estoy preparando otra obra integral que espero sea bien recibida por el público.
Mis discos: «Recopilando I»; «Recopilando II»; «Nanzi Tortone canta Yupanqui» y «Por la huella del sur» (con «Antares»).
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