La obra de Rodrigo García escupe sobre los cimientos de una sociedad de confort, heteronormativa, donde el padre todo-lúcido propicia los castigos merecidos a los cómplices de la necedad. Dirigida por Sergio Osses, en escena los sábados de agosto a las 22 horas en María Castaña.
Otras etiquetas: Soledad González, Teatro