Por Pablo Arietti | redaccion351@gmail.com
En un contexto que vuelve a plantear el individualismo y la meritocracia como receta del progreso, entendiendo al conjunto social como una suerte de competencia de habilidades que no es otra cosa que un «sálvese quien pueda» abierto a cualquier forma posible de violencia, este domingo volverá a celebrarse una respuesta comunitaria de las más nobles y felices.
A propósito de la felicidad, y antes de contar sobre La Feria que se llevará a cabo este domingo 11 de septiembre en Barrio Las Palmas, un pensamiento imprescindible. Hay que tomarse nos minutos para escuchar. Por aquí, tal vez, va la cosa.
Alejandro Dolina sobre la felicidad y la soledad
Como varias que vienen apareciendo, la Feria de Las Palmas es un encuentro de voluntades dispuestas a la comunión, a convertir las desdichas de tantos es un abrazo solidario, para ayudarse entre todos. Una respuesta a la indiferencia, a esa forma de vida que no puede avanzar un paso sin calcular oportunidades de negocio.
Se trata de compartir, de llegarse y tender lazos con las familias que han llevado sus productos para ganarse unos pesos y cubrir así una parte de sus necesidades básicas.
Nos cuentan los organizadores:
La primera feria se realizó el domingo 14 de agosto con 30 puestos de una gran variedad (cosméticos, ropa nueva y usada, macetas, tapices, jarrones, artesanías en mdf, bijouterie, juguetes, herrería, tejidos, etc). La misma fue un gran éxito por el simple hecho de haber ayudado a vecinos a resolver problemas, no sólo económicos. La idea fue insertar personas que se hallaban excluidas del ámbito laboral y productivo, para que volvieran a trabajar y de manera autónoma, en un entorno dirigido al aspecto humano, al impulso constructivo. Nos sentimos muy felices de lo logrado pero aún hay mucho más para hacer, por lo cual invitamos a sumarse a esta comunidad, no sólo a feriantes, sino a cada vecino que quiera participar en un paseo de domingo acompañado de su familia, no sólo para participar sino para disfrutar de este logro de los vecinos.
Para reafirmar la solidaridad estando donde hay que estar, la Feria cuenta con el apoyo de los centros culturales Almazenna y El Juntadero, compartiendo expresiones teatrales y musicales para una jornada de emociones compartidas. También habrá un castillo inflable, atriles para actividades recreativas infantiles, sorteos y sorpresas.
Será un domingo hermoso.
Agendá:
Gran Feria Vecinal.
Domingo 11 de septiembre – 11 a 19 horas.
Avenida Don Bosco 4500 esquina García Martínez.
