Viernes de cruces mágicos

Fly Fly Caroline y Rodrigo Carazo en vivo

9-04-2015 / Agenda, Reseñas
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Este viernes 10 de abril desde las 22.30 horas en Cocina de Culturas, dos proyectos de los mejores que suenan en Córdoba por este tiempo.


Fly Fly Caroline y Rodrigo Carazo en vivo

Por | redaccion351@gmail.com

Poder escribir sobre dos propuestas como las que se van a presentar en un mismo escenario una misma noche, es un motivo de alegría.

La historia de Fly Fly Caroline está bien contada en su página de Facebook. Allí aparecen sus integrantes: Carolina Merlo en voz; guitarra y composiciones; Manolo Lagos en guitarra y coros; Fernando Uñates en percusión, accesorios y coros; Nicolás Travaini en bajo y coros y Gabriel Merlo en batería, percusión y voces.

Hablemos mejor de las canciones publicadas. Cuesta muchísimo, a veces, hablar de las canciones. Se enumeran ediciones, se establecen comparaciones de estilo con otras músicas, se adjetivan méritos, se mencionan los músicos que acompañan, estables o invitados, se difunden las presentaciones, como el presente escrito pretende. Se dice «belleza» o «tremendo».

Desafío: hablar de las canciones de Fly Fly Caroline y de las canciones de Rodrigo Carazo sin usar esas palabras.

El 17 de julio de 2013, Fly Fly Caroline  publica «Acuarela».

El inicio es un aire de bolero, tal vez. Hay un poquito de percusión y apenas unos arpegios de guitarra eléctrica. Aparece la voz de Carolina Merlo, que suena a infancia, a inocencia, a juego. Cuando canta «Si supieras lo intenso que es tu universo, no evaporarías tiempo tan triste y complejo», aparece una batería y un bajo, apenas. La guitarra eléctrica cambia el sonido y acompaña la melodía del canto de una forma que redobla el desafío de pensar otras palabras. Luego, ese encuentro de voz y guitarra crece en emoción en el verso «Y es la sustancia de tu acuarela». En el siguiente verso, aparece una flauta para detonar la instrumentación, con el bajo bien al frente. Llegamos apenas a la mitad de la canción. Vuelve el aire de bolero. El bajo se queda. Hay una segunda estrofa, pero la intensidad volverá con el estribillo y el ataque final del tema, donde el sonido recrudece.

Todo lo dicho sirve para confirmar que puede ser difícil hablar de una canción. Que su hermosura es intransferible desde las palabras. Que no se comentan. Se escuchan, se disfrutan, se comparten, se recomiendan, se vuelven a recomendar, se toman para una entrevista y eso es casi todo.

Es infrecuente una aproximación detallada a una canción en un texto que pretende convencer a un lector, no sólo de que escuche a Fly Fly Caroline, sino que además vaya este jueves a Cocina de Culturas a ver y escuchar la banda en vivo.

Podríamos decir que «Acuarela», una de las primeras canciones publicadas, tiene méritos de sobra para prolongar su permanencia en los reproductores de música de muchos más. Sólo se necesita un poco de interés. «Acuarela» podría ser una de las canciones preferidas de miles que descubrirán Fly Fly Caroline y se enamorarán de su música, por voluntad propia de enamoramiento, o por amistades melómanas que insisten, o por una predilección que irá creciendo con o sin ayuda de alguna radio que repita y repita «Acuarela», o «Espirales», o «Cuando sea como el viento», o las muchas que disfrutamos desde hace un tiempo. A propósito, uina de las radios más queridas y escuchadas, por la difusión de la música local, repite, por ejemplo, «Gabinetes espaciales» de Juanse. ¿Cómo comprobar esa repetición? Escuchando la radio varias horas al día, todos los días. Cada vez que suena «Gabinetes espaciales», una expresión repentina de deseo convoca no menos de cincuenta canciones de músicos locales que podrían ocupar esos tres o cuatro minutos sagrados…

Hay una verdad digna de una publicidad de gaseosa: en una banda, o en cualquier propuesta solista, la voz es casi decisiva. Los músicos pueden ser geniales. La letra y la música pueden combinarse de manera admirable. Si falla el cantante o la cantante, todo será cuesta arriba.

Fly Fly Caroline tiene un par de puntos a favor. La cantante y las canciones. La cantante tiene dos puntos a favor: compone lo que canta y su voz brilla en cualquier instrumentación. Las canciones tienen dos puntos a favor: músicos que las mejoran y videos que las completan.

Las Ruinas

 

Mientras esperamos que las canciones de Fly Fly Caroline se incluyan en un disco, o no, porque ya existen y no es necesario esperar nada para disfrutarlas (aunque el concepto de disco nos siga movilizando), este jueves podremos escucharlas en vivo, en una noche que también tiene otra propuesta imperdible con nombre y apellido.

Rodrigo Carazo es un cantautor que tiene un disco editado. Se llama «Ríe Río». Tiene ocho canciones. Según la descripción de su autor, «la búsqueda lírica y armónica navega desde el folk hacia el afro beat. Sin limitaciones estéticas, afirma la confianza en el universo, donde la integración, la risa, el amor, el cambio permanente, el juego, el viaje, el arte y los abrazos sirven de motor para seguir creando, creciendo y apostando por el mundo que queremos.»

Según la incapacidad de sísntesis del presente escrito, Rodrigo Carazo tiene dos puntos a favor: compuso canciones geniales y las canta de manera genial. Así de complejo.

Hay creadores de músicas que parecen imponer palabras. Rodrigo Carazo es Inspiración. Hay una vivencia que se ha repetido, entre otras, al escucharlo en entrevistas radiales. Querido y admirado por sus colegas, el «Chori» ha visitado distintos programas atentos a la música local y en más de una oportunidad pudo estrenar canciones. La vivencia concreta se puede resumir en tres momentos: a) escuchando a Rodrigo decir «Bueno, si les parece les voy a tocar una canción nueva que compuse en estos días, que habla un poco de tal cosa…»; b) escuchando la canción; c) mandando mensajes a la radio, felicitando y agradeciendo, y quedando a la espera de poder encontrarse con la canción en algún formato que la mande derecho a las carpetas inamovibles, hasta que venga el próximo disco.

Un ejemplo: «Ave que sabe»

 

Antes de la llegada de «Oir e ir», podremos ver a Rodrigo haciendo magia con su voz y sus instrumentos, junto a una banda integrada por Fede Seimandi, Gonza Sánchez, Andrés Muratore y Jose Hernan Figueroa.

Otra propuesta imperdible, este fin de semana, para escuchar, aplaudir y alimentar las carpetas inamovibles del reproductor cotidiano.

Agendá:

Fly Fly Caroline y Rodrigo Carazo en concierto. 

Viernes 10 de abril – 22.30 horas.

Cocina de Culturas – Av. Julio A. Roca 491.

Entrada: $50.