Foto: Sala Siambretta.
2016
El año arrancó con un buen propósito: juntar plata para una flauta que le robaron a una amiga. Ahí armamos un juntín folklórico con la damnificada y otros personajes, ensayamos, charlamos tocamos y me presentaron al socio Tito Mangialavori porque él tenía un berretín similar al mío: hacer tango, con guitarras, fresco, nuevo, original.
Así se armó el reparto: Angelelli a la composición y la voz; Mangialavori a la guitarra y a los arreglos.
En el proyecto se fueron sumando durante el año Gianni Pesci, Abraham Luna y Gustavo Reyes, en la móvil formación de Tres Guitarras (el conjunto de guitarras en cuestión).
Actuamos en diversos templos tangueros y fue una emoción inmensa ver que bailaban mis temas.
Participamos en concursos con obras originales. Y no ganamos. Arreglamos muchos temas. Dimos notas, grabamos demos y discutimos por los arreglos. Y largamos oficialmente la preparación de mi primer disco.
Gané la beca de la Fundación Tango Sin Fin para ir al Encuentro Tango Para Músicos 2017. Canté en la tesis del pianista Julián Heredia. Compuse más temas y en muchos bares a los que fui a buscar fecha me dijeron “Tango no”.
Me proyecto a brindar mis temas a los intérpretes, a trabajar en red con el resto de los que hacen el mismo género que yo y con los que no. En las devoluciones que recibo cuando “bajo del escenario” puedo percibir que las canciones van encontrando sus oídos. Que no importa el no. La palabra puede más y va sonando. Ahora trabajaremos por seguir creando con la misma inocencia y descaro con la que arrancamos, sin perder el compás.
Gracias por la compañía en 2016. Feliz 2017.
2015
En el año 2015 comencé con un repertorio exclusivamente propio. Luego de un tiempo donde trabajé con géneros afro, presenté un repertorio basado en la tradición argentina, con composiciones de tangos, milongas, candombe y cuarteto característico.
Junto a músicos invitados toqué hasta mediados de julio y luego dejé las presentaciones en vivo para concentrarme en los arreglos de los temas que ya habían sido presentados en vivo y en la composición de nuevos temas.
Participé en la formación de típica con Julián Peralta, pero el año no terminó. Falta grabar.
2012
Mi palabra para el 2012 es expansión.
Tengo la idea de la música como el elemento que conforma cada instante de la vida, es el espíritu de la vida.
Participar en espectáculos teatrales, muestras, performances y como invitada en otras bandas amplió mucho más esa visión porque se expandió la vida.
En 2013 la meta es producir los eventos planteando otros significados y otras tradiciones, en una ciudad que a veces veo totalizada por géneros que se proponen como «característicos o auténticos», y seguir ahondando en el cruce de disciplinas, artes, texturas y todo lo que plantea un desafío para la definición de «música de acá».
Estallar esa definición, expandir el sonido.
Eso es un Feliz Año Nuevo.
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