2021
El 2021 fue un año bastante quieto, raro. No toqué mucho en vivo y sí me mantuve puertas adentro de mi estudio para buscar nuevos sonidos, nuevas armonías y nuevos puntos de enamoramiento con la música, que a veces es como una relación de pareja, hay que reinventar y ser creativo para que ese vínculo tampoco se nos resquebraje.
Son tiempos muy raros para todos, no hay que perder la fe y al mismo tiempo tratar de ser lo menos cabeza dura posible. Todo parece estar sobrepasándonos, pero hay que seguir tocando.
Personalmente, continué desarrollando mis dúos, Iscaro García dúo y Quimera (Iscaro Menárguez). Con este último grabamos y grabamos y ya casi tenemos listo un disco.
También acabo de finalizar otro con Wenchi Lazo, mucha experimentación, visiones hacia otras dimensiones musicales, ojalá si hay un publico, nos acompañe, pero se ve algo difícil ya que ese público parece querer escuchar esa que “sepamos todos”, se entiende, como entidad, ese publico también sufrió con los acontecimientos que estamos transitando, y encima ahora esta guerra…
En fin, valor, huevos y mucho amor a tu instrumento y a la música para seguir camino.
2018
Este año fue particularmente raro para mí. ¡Toqué bastante pero creo que debí haber consultado antes al meteorólogo porque de quince fechas llovió en trece! Esto hizo especialmente cuesta arriba el tema de la convocatoria, pero al mismo tiempo, probé nuevas formaciones, como es el caso de UFI (Urioste/Fenoglio/Íscaro) oboe, trombón y guitarra eléctrica. Con un repertorio dinámico y sensible con tintes de jazz y música para películas, con este trío tocamos bastante. También toque con mi trío Buma, integrado por Pablo Valotta en bajo y Santi Hernández en batería. Con ellos estoy por entrar a grabar pronto en estudio. Nos hemos enfocado en una especie de jazz más amable y accesible para más gente, pero para nada standard.
También estoy juntándome con un arpista mendocino, Ramiro Albino, especialista en música antigua y barroca. Resulta interesante la combinación entre sonido jazz tex mex y arpa barroca. Esto está en proceso de gestación.
Después, por razones de crisis y demás problemas financieros de sus integrantes, hemos hecho una pausa en mi grupo de rock instrumental “Antiheroe”, pero seguramente lo continuaré en algún momento un poco más propicio. Y sí, la crisis me pegó bastante en lo musical en general. La apatía de la gente se hizo como más notable, la incertidumbre en la suerte nefasta que está teniendo el CD como formato de contención de los músicos hace que la cosa se ponga cada vez más incierta. Eso se nota en general. Resulta que el CD como formato dejó de brindar a los músicos un refugio físico convirtiéndose en un objeto cada día mas inservible. Los nuevos formatos electrónicos para internet se ofrecen como una opción pero sólo para los artistas más masivos. Los demás, estamos como condenados a un lentísimo goteo de centavos, que para nada hacen recuperar lo que sí nos cuesta pagar en estudios y/o procesos de grabación, mezcla y mastering. En resumidas cuentas, estamos en el horno, pero le seguimos poniendo onda como mejor nos sale. Se precisa un intenso programa de apoyo o estatal o como cuernos sea para que la música como arte no se convierta en una manchancha despiadada de un sálvese quien pueda sideral donde cada día más, un like podría resultar más vital que un kilo de pan. Pero desgraciadamente, al pan, también lo necesitamos. Por eso, hoy más que nunca, nos adherimos al “salve las ballenas” que usa Greenpeace y agregamos un “Salve a los Músicos.”
2013
Foto: María Ledesma.
Este año 2013 fue sumamente intenso para mí, por varias razones, pero principalmente porque continué presentando mi último cd “Anima Fugitiva”, producido en Buenos Aires y editado por el sello Viajero Inmóvil Records; lo presenté en los principales festivales de jazz del país como son el de Buenos Aires y el de Córdoba, y también pude compartir hermosas sesiones de buena música con músicos increíbles y además con quienes en su mayoría tengo una inmensa amistad y profunda comunicación espiritual.
Ahora, ya cerca de que se termine el año, me encuentro de nuevo en Córdoba con mucho trabajo de grabaciones de video y cd y también una invitación a tocar en El Vecindario junto a Enrico Barbizi y Osvaldo Brizuela.
Un año intenso, cálido y profundo para mí desde donde lo mire. Significó también el año de mi recuperación, ya que el anterior casi me aniquila jejeje. En este pude ponerme de nuevo de pie y continuar haciendo lo que más disfruto en la vida: música.
2012
El 2012 ha sido para mí un año bastante asesino en muchos aspectos pero me siento fuerte y no voy a dejar que me voltee. Tuve un impass de salud de casi 6 meses , pero ya recuperado tuve la oportunidad inmejorable de tocar con mi Trío Desatanudos en el Festival internacional de Jazz de Buenos Aires y en la Noche de Los Museos en el Observatorio Astronómico de Córdoba, dos eventos que contaron con participación masiva de público, y que llenaron de alegría mi corazón musical.
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