2018
Como una premonición, este año fue todo En voz de Mujer. Allá por febrero nos juntábamos a ensayar y la invitamos a una gran amiga, Pali Contrini a chusmear lo que sonaba. Ella escuchó, compartió, sumergió el pincel en la copa de vino y empezó a crear lo que después se transformaría en la gráfica de nuestro primer disco, “entendió todo” pensamos sin decirlo, como tantas de las decisiones tácitas que nos convidan nuevas aventuras.
Fuimos atravesando diferentes escenarios cordobeses que siempre nos reciben tan amorosamente, anduvimos por Gondwana Bar Cultural, Los Siete Locos, Centro Cultural Graciela Carena y formando parte de algunos actos escolares que siempre nos rememoran nuestro paso por la escuela. Sin dudas hay un antes y un después en este año, en el medio, “En Voz de Mujer”, invitando a estas comadres a desarmarse y volverse a armar en un nuevo cancionero.
El 2018 ha estado repleto de encuentros y redes con músicas hermosas de todo el país. Después de participar del 1° Encuentro Nacional de Música de Mujeres en Santiago del Estero, volvimos a casa florecidas de reconocernos en tantas formas de hacer la canción. Dos semanas después, ya estábamos viajando de nuevo, en esta oportunidad un poquito más allá, de la mano de Mujeres por el Arte – Tucumán, participamos de la primera “Telesiada”, fiesta que propone compartir la canción empoderada, con un fueguito que convida hacer ceniza los dolores, mientras se zapatea y se abraza. Cinco conciertos en tres días maravillosos, Tafí Viejo, San Miguel y San Pedro nos hicieron un lugar para seguir coleccionando rincones.
Y seguimos tejiéndonos mientras tanto por acá, participando de la Olla Quilombera organizada por Guaranza Tu Quilombai, y esperando ansiosas el reencuentro con las hermanas, esta vez la excusa fue un gran evento que decidimos llamar “Folklóricas”, este primer ciclo que tiene la idea de continuarse, fue un fin de semana de conciertos, guitarreadas, talleres y charlas para repensarnos y plantarnos en el lugar que, como mujeres músicas, queremos estar. Cada vez éramos más, Jesu Guzmán, Mery Paz, Eli Fernández, Flor Straub, Clara Cantore, Anatema, Bren Coll, Araceli Bonfigli, Marce Vicente y Mujeres Músicas de SONAR recibiendo a Música de Mujeres de Santiago del Estero, a el Colectivo Mujeres Músicas de Rosario, a Mujeres por el Arte – Tucumán, Cuchá de La Plata y a Paula Rivera de INAMU, inaugurando así una seguidilla de encuentros federales que anuncian la agenda de género del 2019.
Y así, yendo y viniendo, todo el año significó encontrarse, descubrirse y escucharse, a nosotras y a estas nuevas hermanas para construir casa y sonido en todas partes.
Finalmente, llegó noviembre, el mes auguraba la presentación del disco, pero antes de eso, habitamos Cocina de Culturas compartiendo escenario con Chango Pirola y Cocho Pedraza, participamos por primera vez del programa Música al Paso, de la Municipalidad de Córdoba, tuvimos la dicha de recibir a Marcela Gleiser, que, desde Buenos Aires, nos trajo “Pupilas”, su último material discográfico.
El 30 de noviembre, rodeadas de amigxs que convidaron sin medida su arte, vivimos el momento más importante del año para nosotras. Presentamos “En voz de mujer”, y pudimos contar de las rutas, los vinos y el amor con el que transitamos esta experiencia.
Así, todavía suspirando de la hermosura, haciendo planes nuevos para seguir en movimiento, en este movimiento, perdiendo la cuenta de cuántas veces escribimos “primer” en este anuario, sonreímos por lo logrado y lo hacemos canción para llevar “En voz de mujer” a todos los abrazos posibles.
2017
Nos habíamos propuesto pisar todos los escenarios posibles durante el 2017, así que desde febrero, Anatema anda paseando en Córdoba, por Casa Laberinto, Los Infernales de Güemes, El paseo de las Artes, Los Siete Locos, Gondwana, Plaza Güemes, Centros Culturales de Los Plátanos y San Martín, El Grito Sagrado, Espacio Daxel, etc.
También nos fuimos al interior: Río Ceballos, Carlos Paz, Almafuerte y Río Tercero. Pero al parecer, seguíamos inquietas y organizamos tres giras, dos por San Luis pasando por Merlo y Villa Mercedes y otra por Neuquén y Cipolletti.
El amor con el que nos han recibido es difícil de explicar con palabras. Somos felices de encontrarnos con personas que defienden y promueven la cultura y el arte independiente, y que además no titubearon en acompañar a estas comadres, porque Anatema es eso, la vida entre comadres que se cuidan, se escuchan, se abrazan, se charlan, se empoderan y después pasan todo eso al bombo, la voz y la guitarra.
Estamos llenas de anécdotas y amistades nuevas, nos llevamos en la pupila trabajar junto a los amigos de Peñíes y lograr la primera edición de la Okupeña con localidades agotadas.
Fotografiamos cada gira, acompañadas de alguna copiloto, medio manager, medio plomo, cien por ciento amiga que se sumaba sin peros a viajar con Anatema.
Y la frutilla del postre, gestado entre viaje y viaje, nuestro primer disco, lleno de invitados de lujo que admiramos y queremos un montón…
La invitación a este anuario nos sentó a recordar, entre lágrimas de felicidad, tantas experiencias vividas y por vivir. Venimos con envión para compartir canciones nuevas y seguir defendiendo la música de la tierra.
¡Salud!
Belén Corzo – Daniela Medrano – Carolina Rabe
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