Héctor Pedro Alem

Héctor Pedro Alem

2018

Foto: Brenda Bustos.

El 2018 fue un año que vivencié al mejor estilo “3R”… Reencontrarme, Revisarme y Reinventarme… Para luego fluir con cada persona en cada encuentro que me presentó la vida y el arte. En este loco camino que decidí emprender, me encontré con seres maravillosos que me invitaron a compartir sus vidas y su escenario; pudiendo decir con toda certeza que cada uno de ellos dejó plasmada su impronta personal en mi vida; recordando también que en ambos elencos no confluían los mismos colegas pero sí la misma vibra y predisposición para crear. De esta comunión de ideas y propuestas surgieron las obras “Che Carlitos, Retrato de un Argentino” y “Requiem para Cinco Instrumentos Desafinados”; que fueron estrenadas en espacios en los que me sentí muy cómodo como si fueran mi casa: el Centro Cultural Córdoba y Quinto Deva respectivamente.

Además de estas obras en cartel, pude disfrutar de un gran año a nivel audiovisual, ya que participé junto a colegas que aprecio mucho en el Largometraje “Los Hipócritas” y en las Series “RRPP” y “Negativo”, que se estrenarán en el 2019. También estoy muy agradecido a los estudiantes de cine de la UNC y LA METRO, con los cuales compartí varios rodajes de cortometrajes que fueron trabajos prácticos para distintas cátedras y en alguno de los casos estos trabajos se hicieron presentes en festivales. Recuerdo también los buenos momentos que pasé en un par de publicidades, gracias a todos aquellos que me convocaron.

Hacia mitad del 2018 y con miras de estreno en los primeros meses de 2019 comencé a ensayar nuevas propuestas teatrales con otros grupos de colegas, incluida mi primera obra como director.

Desde luego y haciendo un párrafo aparte, quiero agradecer de todo corazón a los espectadores por su presencia, sus comentarios y el apoyo que brindaron al teatro de nuestra ciudad durante todo el año que pasó, teniendo en cuenta la difícil situación económica a nivel país que estamos transitando; eso me lleva a reflexionar que la convivencia entre espectador y obra teatral debe continuar forjando nuevos paradigmas de comunicación social, razón por la cual extiendo la invitación a que renueven sus deseos de acompañar a las nuevas propuestas que cada elenco independiente presente en nuestra provincia en este nuevo año.

Para finalizar les comento que el año que transité como alumno regular en el Profesorado de Teatro Roberto Arlt estuvo signado por dos grandes realidades que me marcaron a fuego como persona y como profesional. Una fue el fabuloso grupo humano de compañeras y compañeros con los cuales recorrí el camino de nuevos e interesantes saberes, seguro continuaremos juntos en esta última etapa de la carrera. La otra realidad fuerte y emocionante tuvo que ver con un paso importante como futuro docente: haber sido elegido por los estudiantes del profesorado, junto a otras compañeras, para formar parte del Consejo Consultivo de la Institución. ¡A ellos también les agradezco!

Gran 2019 para ustedes Redacción 351 y que la expectativa que tienen en este año se concrete y se supere. Hasta un próximo encuentro.

 

2015

Sobre “El Principito”:

«La experiencia nos enseña que amar no significa en absoluto mirarnos el uno al otro, sino mirar juntos en la misma dirección.». Antoine de Saint-Exupéry.

Con este fragmento redactado por este iluminado escritor, defino mi vivencia en esta bella obra de teatro.

La extraordinaria experiencia que obtuve formando parte de este maravilloso elenco, fue comprender desde el inicio del proceso, que debíamos trasladar el alma y la esencia que inspira el texto “El Principito”, involucrándonos con la humanidad e inocencia de cada uno de nosotros y sumando también la entrega, el compromiso y el afecto en cada ensayo y en cada función, permitiendo así enriquecer la historia teatral y generando en el publico mucha emoción y participación.

Lo que recuerdo como muy gratificante en cada función, era la cara de felicidad de todo el mundo y el respeto y el cariño de los adultos y de los niños por cada personaje de la historia. A mí me tocó interpretar los roles de El Zorro, con el cual los niños se divirtieron e interactuaron mucho al final de cada función, y el Geógrafo, representando a un anciano. Se creaban climas de mucho silencio y escucha, hasta que llegaba alguna situación graciosa que rompía con el silencio con El Hombre Vanidoso. Lo más entretenido era ver la reacción sorpresiva de los espectadores ante cada intervención de este personaje.

En resumen, viví momentos muy agradables en escena, pero como les conté al inicio de la nota, todo esto fue posible gracias a trabajar en equipo con mis compañeros de escena y con nuestros queridos técnicos; sino todo sería muy cuesta arriba.

Nuestros deseos y expectativas tienen que ver con vivir nuevos y superadores momentos en cada función que nos toque en el 2016, así logramos que esta bella historia siga trascendiendo y llegando a más personas en nuestra ciudad y en el país.

Los invitamos a que nos acompañen en el recorrido que haremos con “El Principito” el año que viene por las salas de nuestra ciudad, y desde ya, les auguramos felicidades y un año repleto de emociones.