Circo Davinci

2016

Como Circo Davinci en el 2016 concentramos todo nuestro caudal de trabajo artístico en crear y estrenar una obra de teatro circo y música que llamamos: “Fanfarria”

La idea surgió en la búsqueda de una nueva calidad musical y de una presencia actoral colectiva, del deseo de crear un espectáculo integral que conjugue el teatro, la música y el circo de tal forma que parezca una pieza artística fuera de todo género. ¡Abracadabra! ¡Hágase lo que no está hecho!

Para darle nacimiento, para originar, para impulsar el proyecto y concretarlo empezamos a tender parámetros de hipnotismo, contemplación, ritualidad, calma, caos, resignificación de objetos, paisajes sonoros, movimiento escénico y registro actoral… el proceso creativo empezó imaginando misterios, alejándose de las certezas y buceando bien profundo en la no conciencia de una novena de actores/músicos desplegados en el espacio e impulsados por la fascinación de lo nuevo.

Durante un año se trabajó en la composición y el ensayo musical de 9 temas con formato de vientos, acordeón y percusión que permitieran a los ejecutantes tocar y desplazarse por el espacio. Para acentuar la austeridad y la facilidad de movilidad sumamos a la puesta, el estuche de cada instrumento transformándolos en generadores de escenografías, locaciones escénicas y resignificación.

Durante 6 meses el equipo se concentró en el trabajo de laboratorio para encajar todas las partes de este gran juego de movimiento espacial, sonido estimulante, composición corporal y manipulación de objetos.

Para generar la dramaturgia partimos de la sensación ambiental y emocional que sugerían las 9 músicas ensayadas, combinamos la potencia de estar los 9 personajes juntos en escena y la delicadeza de uno solo, acentuamos la relación orgánica con un instrumento y lo transformamos en una extensión de nuestros cuerpos escénicos. Drama y tramaturgicamente, la obra mantiene la fascinación por lo que va a venir, se presenta en forma ascendente y se contemplan las ideas abstractas del nacimiento, la naturaleza, la comunidad, el rito, la reflexión, la muerte, el juego, la risa, el cambio y la transformación.

El objetivo planteado es que Fanfarria represente genuinamente la esencia y el estado del grupo en esta nueva etapa, en donde decidimos trabajar con lo mínimo para encontrarle la máxima utilidad y felicidad. ¡Y así es!

Como expectativa tenemos que nosotros, como actores y músicos, estemos plenos y luminosos en cada función y el público en general que vea esta producción colectiva, cooperativa e independiente se sienta hipnotizado y fascinado como todos nosotros. En los cuatro meses finales del 2016 realizamos 13 funciones de la Fanfarria logrando la comunión entre el público – los actores y la música.

Ahora como grupo estamos transitando la temporada de verano y soñando un año de armonía, encuentro y felicidad por la vida misma.